Comentan los medios nacionales en España que Podemos, la joven formación que apunta a doblar el número de votos para las próximas elecciones, ha ido a Argentina. Cuando digo Podemos digo algunos de sus altos representantes, porque Podemos Argentina ya existe como círculo allí. La cosa es que no queda nada claro a qué han ido.
Según algún medio, han viajado “por el escándalo del impago” en aquel país. ¿En serio?
A mí eso me sorprende. Normalmente el que viaja a un lugar cuando hay un escándalo, es quien tiene autoridad en la materia y en dicho lugar, pero no es el caso. Estamos asistiendo a un fenónemo de inoculación política (no entro a calificarlo) de la misma forma que se inocula una espora en un medio adecuado para que forme un hongo y produzca setas. No he estado nunca en Argentina y de momento no está en mi lista inmediata de viajes, pero me sorprende que la realidad de dicho país permita que un fenómeno como Podemos se reproduzca allí, si es que lo logra hacer. ¿Tan similar es su situación a la de España, Grecia, Italia o Portugal?
Realmente han ido a echar un vistazo a sus posibilidades de expansión, lo cual es totalmente legítimo porque las ideas se expanden y las personas las transmiten. Parece que los viajes de los integrantes de Podemos, antes y después de su constitución como partido, a América (con preferencia al llamado “grupo bolivariano” en el que ahora se encuentra también CFK y Argentina) les han salido rentables. Han dado de comer a muchos de sus integrantes durante un largo tiempo y han forjado estrechos lazos con países como Venezuela y su “peculiar” gobierno, haciendo bandera en Europa de algunas de las ideas que en ese caldo de cultivo se mueven.
Al grano. Algunas de las cosas que nos quedamos con ganas de que nos respondan en España, parece que tienen menos problemas a la hora de responderlas fuera del país. A mí eso tampoco me dice nada bueno, lo hagan ellos o lo haga Rajoy. Pero lo que tenemos es con lo que hay que jugar, y desde Argentina han tomado posición para “revelarnos” algunas de las lineas de lo que puede ser un gobierno bajo su control.
La cosa es que el cabeza pensante de la formación, el señor Monedero -tiene nombre de wallet, lo sé, y sí, me hace hasta gracia la casualidad- ha ido a decir algunas cosas como que España no es Venezuela, pero aplaude lo bueno hecho allí y en Cuba por Hugo Chávez y Fidel Castro [sic]. Asimismo ha hecho unas interesantes reflexiones (…) sobre la película Matrix, la pastilla roja y la azul… el abrir los ojos a la realidad o negarse a hacerlo… y cosas así, como cuando los magos gesticulan con una mano rápidamente para que tu atención no se pose en la otra. Trucos de Jedi.
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También ha dejado otra perla, que curiosamente en los medios españoles ni siquiera han reproducido en posiciones relevantes: “lo que necesitamos es una nueva moneda europea, que no sea el euro ni regresar a la peseta [antigua moneda en España]”
¡¡PodemosCoin al rescate!!
No parece mala idea.
De hecho, lo que impide a España aplicar la misma primera medida que tomó en su día Felipe González es que no tenemos moneda propia (muy agudo tú, Monedero). Yo lo recuerdo. Un día el dólar valía 60 pesetas, y al día siguiente el dólar valía 120 pesetas y yo le preguntaba a mi padre que cómo había sido tan poco inteligente de no poner su dinero en dólares. Era una España en pañales que devaluó su moneda un 50% frente al dólar para poner en marcha una economía de otros tiempos, que nos ha traído hasta aquí. Podemos no puede devaluar la moneda porque no tenemos moneda propia.
¿Solución? La fabricamos nosotros.
Al menos fue algo honesto el señor Monedero cuando al ser preguntado sobre las características de la postulada moneda contestó que no lo tenía claro porque “las variables son tantas”, y remató con “es como lo de los fondos buitre con Argentina. Yo sé que no voy a pagar. ¿Qué voy a hacer? Pues ya iremos viendo.”
En un texto anterior hicimos notar la fragilidad de todo planteamiento económico de Podemos con el planteo que le hizo el economista Daniel Lacalle al encargado de estos asuntos en dicho partido, cuando lo llevó a declarar -veladamente- que buscaba la complicidad de otros países de la zona para plantarle cara a Europa y hacer default (impago de la deuda) en grupo. Lacalle hizo notar la consiguiente ausencia absoluta de financiación desde el día siguiente si a un gobierno -cualquiera- se le ocurría intentar semejante pirueta.
De momento, parece ser que la idea de Monedero -aka Mr.Wallet- es que sea una moneda para los países del sur. Entiendo que del sur de Europa. No ha aclarado más cuestiones relativas a la misma, pero doy por supuesto que un partido que aspira a poder tomar el control económico de esa forma no comulga demasiado bien con monedas como Bitcoin.
Por cierto, el Círculo Bitcoin de Podemos sigue sin respirar, y eso que hace unos días el líder de la formación ha hecho un par de eventos en las redes sociales para responder las preguntas que la gente le quisiera hacer: nada sobre Bitcoin y nada sobre drogas o cannabis. Hay silencios de una elocuencia insultante.
Les dejo a ustedes especular a gusto: si será una criptomoneda, si tendrá respaldo en algún bien, si estará emitida por una institución… y cuánto tiempo tardarían los países “forzados” a cambiar a dicha moneda en volver al trueque como medio de subsistencia.
PodemosCoin, tu moneda para el default en grupo.