¿Pueden matar a Bitcoin? (El Estado vs las criptomonedas)
Con la ayuda de Leo Beltrán intentamos anticipar los próximos ataques contra el movimiento iniciado por Satoshi Nakamoto, y evaluamos la viabilidad de cada uno de ellos.
Con la ayuda de Leo Beltrán intentamos anticipar los próximos ataques contra el movimiento iniciado por Satoshi Nakamoto, y evaluamos la viabilidad de cada uno de ellos.
Al igual que Kim Dotcom –y que Satoshi Nakamoto–, Elon Musk considera que el valor de una criptomoneda deriva fundamentalmente de su condición de dinero en efectivo p2p.
La implementación del proyecto de Satoshi Nakamoto servirá para separar definitivamente la Moneda del Estado, poniendo fin de una vez y para siempre al saqueo institucionalizado y a los estragos del ciclo económico… o no servirá para nada.
A los ojos de los early adopters, el dominio de Blockstream / Core luce precisamente como el monopolio estatal que Satoshi Nakamoto se atrevió a desafiar en enero de 2009, cuando creó el primer eslabón de la cadena de bloques.
Acobardados por obstáculos que no habían previsto, o que suponían fácilmente removibles, prefieren regodearse en el malsano placer de la autoconmiseración antes que mirar de frente el desafío planteado por Satoshi Nakamoto.
En los dominios de Blockstream / Core se considera herejía tan solo atreverse a contemplar la idea de que Bitcoin podría ser eso que Satoshi Nakamoto describió en su whitepaper.
¿Cómo se explica el incremento de los ataques por parte de los Blockstream boys y su horda de trolls iracundos, ahora que la secesión es una realidad y nadie obstaculiza sus planes? Fácil: aunque no lo digan, ellos saben perfectamente que un Bitcoin lento, ineficiente, impredecible, antieconómico, monopólico, centralizado, censurado, fraudulento (“transacciones rápidas, tarifas bajas”, anuncia todavía bitcoin.org) y deliberadamente descarriado por las instituciones que más pierden con la desintermediación del dinero, no puede competir con la creación de Satoshi Nakamoto.
¿De qué hablan los Blockstream boys cuando hablan de consenso? No se refieren, desde luego, al proceso descentralizado ideado por Satoshi Nakamoto para garantizar tanto la evolución de Bitcoin como la inmutabilidad de sus propiedades monetarias. De hecho, el “consenso Blockstream” (“confía en los empleados de Blockstream y cierra la boca”) es exactamente lo opuesto al “consenso Nakamoto” tal como se describe en el white paper.
A partir de hoy elBitcoin.org entrará en estado de hibernación. Regresaremos a la cueva de la cual salimos hace cinco años, cuando nos lanzamos a difundir la palabra de Satoshi Nakamoto puerta a puerta, white paper en mano, con la convicción de un testigo de Jehová que efectivamente ha sido testigo de un milagro.
Bitcoin fue creado por Satoshi Nakamoto precisamente para que ningún grupo de iluminados pueda meterse con nuestro dinero, no importa si ese grupo está integrado por ancianos incontinentes al servicio del Estado o por idiot savants al servicio de una compañía (si es que esta compañía no es en realidad un testaferro de algún gobierno).