Es importante distinguir entre Bitcoin la moneda y Bitcoin la tecnología de base. No importa lo que ocurra con la moneda, ya que ésta es solo la primera “aplicación” de la red Bitcoin.
Lo que en realidad nos legó Satoshi Nakamoto fue una solución elegante para un problema de computación distribuida que ha existido – sin solución – por casi 40 años: el Problema de los dos generales. En otras palabras, el desafío de lograr un consenso en un sistema distribuido, aún cuando no se puede confiar en ninguna de las partes involucradas, ni en los nodos que integran la red. La elegante solución que Satoshi Nakamoto creó, empleando un sistema de prueba de trabajo, no es perfecta, pero funciona bien y es escalable.
Pero lo que aún no hemos notado es que la computación distribuida ha dado lugar a nuevas áreas del saber, apenas exploradas. Dos de ellas, creo, tendrán un gran impacto el desarrollo de cripto-monedas basadas en una cadena de bloques.
La primera es la macroeconomía computacional. La macroeconomía es el estudio de las economías como un todo, es decir, el estudio de la oferta monetaria, la inflación, la deflación, el PBI, entre muchas otras variables de toda una economía. Es de lo que se encargaría un banco central.
Con la invención de las cripto-monedas, ahora tenemos acceso a la macroeconomía computacional, lo que significa que tenemos una macroeconomía que no está basada en estadísticas, sino en datos puntuales y precisos, derivados directamente de las interacciones registradas en la cadena de bloques.
Podemos saber a ciencia cierta la tasa de inflación; podemos estudiar en detalle la dinámica de la masa monetaria, comparar diferentes magnitudes con el tipo de cambio… Podemos ver el funcionamiento de una economía en tiempo real, y hacer un análisis cuantitativo completo. Creo que estamos presenciando el nacimiento de una nueva ciencia, porque hasta ahora sólo habíamos podido estudiar las economías a través de análisis estadísticos de terceros, y usualmente con un gran retraso con respecto al momento de los acontecimientos. Hablamos de estadísticas con 6 a 9 meses de retraso, que luego son examinadas para tratar de encontrar causalidad o correlación entre los datos y así descubrir lo que realmente pasó en la economía.
Con las cripto-monedas no necesitas hacer eso; sólo debes hacer un análisis cuantitativo basándote en los datos disponibles para todos, y puedes hacerlo en tiempo real. Eso nunca antes había sido posible.
La otra nueva ciencia es la microeconomía computacional. La microeconomía estudia el comportamiento de los agentes económicos en el mercado, tales como consumidores, empresas, trabajadores e inversores. Con las cripto-monedas podemos acceder a la microeconomía computacional. Esencialmente, todos los datos que necesitas para estudiar una economía están ahí mismo, en la cadena de bloques. Y no me refiero a grandes números; me refiero a transacciones individuales, y a la capacidad de acceder a una enorme cantidad de datos y de hacer análisis cuantitativos sobre las transacciones publicadas en la cadena de bloques.
Nunca nadie ha tenido acceso a ese nivel de profundidad en economías de tal envergadura. De nuevo, en vez de tener que estudiar informes trimestrales de compañías, meses después de ocurridos los hechos, e intentar deducir causalidades o correlaciones a partir de datos estadísticos, podemos hacer un análisis cuantitativo de datos concretos, que hacen referencia a hechos en tiempo real, directamente sobre la cadena de bloques. Repito, esto es una nueva ciencia, jamás se ha hecho antes.
Esta es una de las cosas que pasamos por alto cuando hablamos de Bitcoin la moneda. Incluso si la moneda desapareciera, Satoshi nos habría legado al menos dos nuevas disciplinas, y yo creo que estas cosas tendrán un alcance mucho mayor en el futuro.
Por Andreas Antonopoulos para Let’s Talk Bitcoin
Escuchar a Andreas decir esto en el Episodio 68
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