Fuente: The Coin Telegraph
Justus Ranvier, miembro del Open Bitcoin Privacy Project, propuso en un ensayo que la idea de un límite al tamaño de los bloques se basa en una falacia económica. Dice que si la posibilidad de descubrir precios fuera incluida en la red Bitcoin, el tamaño de los bloques no necesitaría un límite.
Mi propuesta es: en lugar de tratar de que la gente utilice lo menos posible un recurso que está siendo proporcionado de forma gratuita, encontrar la manera de permitir que los usuarios de los recursos de la red paguen a los proveedores de dichos recursos.
– Justus Ranvier
En cuanto a su aplicación, una vez que el «precio» de cualquier transacción dada es descubierto, dice Ranvier, los nodos de Bitcoin, los mineros, y los usuarios podrían pagarse entre sí directamente por el ancho de banda, la información y los servicios de hardware, a través de canales de micro pagos.
El debate sobre el tamaño del bloque de Bitcoin suele presentarse casi en términos políticos, como si tuviese sólo dos lados –rojo o azul, Republicano o Demócrata, Conservador o Socialista–.
Y como es común en la política, este paradigma de sólo dos opciones también parece ser falso cuando se aplica a Bitcoin. Le pedimos a Ranvier que nos cuente más sobre su idea de una «tercera opción».
Cualquier intento de establecer una política definida por el protocolo en relación con el tamaño del bloque requeriría que los diseñadores de dicha política resuelvan el problema del cálculo económico centralizado con el fin de crear la política ideal. Dado que eso no es posible, cualquier política elegida dará lugar a una mala asignación de recursos (y en consecuencia alguna forma de escasez).
– Justus Ranvier
CoinTelegraph: Tú argumentas que tanto la propuesta de «no hacer nada» como la idea del límite de 20 MB están erradas. ¿Cuál sería el error?
Justus Ranvier: El asunto es que nadie sabe, o puede saber, el número correcto de transacciones que la red Bitcoin debe procesar, ni a qué precio debe hacerlo.
Cualquier intento de establecer una política definida por el protocolo en relación con el tamaño del bloque requeriría que los diseñadores de dicha política resuelvan el problema del cálculo económico centralizado con el fin de crear la política ideal. Dado que eso no es posible, cualquier política elegida dará lugar a una mala asignación de recursos (y en consecuencia alguna forma de escasez).
CT: ¿Cómo funcionaría el descubrimiento de precios entre los usuarios, los mineros y los nodos?
JR: En este momento, la red Bitcoin tiene un problema con la asignación de ancho de banda debido al hecho de que cada nodo completo regala tanto ancho de banda como los otros nodos le piden. Esto significa que a medida que el número de usuarios aumenta, la carga financiera de los operadores de nodos que están donando sus recursos también se incrementa.
Como en todo problema asociado a la «tragedia de los comunes«, la solución es abandonar la colectivización y permitir que se forme un mercado que conecte productores y clientes.
Mi propuesta es: en lugar de tratar de que la gente utilice lo menos posible un recurso que está siendo proporcionado de forma gratuita, encontrar la manera de permitir que los usuarios de los recursos de la red paguen a los proveedores de dichos recursos.
En ese escenario, cada nodo en la red actúa como un agente independiente que intenta obtener información que otras entidades quieren comprar, y luego les vende esa información. Por ejemplo:
- Los usuarios finales quieren que sus operaciones lleguen a los mineros.
- Los usuarios finales quieren recibir información sobre el balance de su monedero.
- Los mineros quieren recibir transacciones que paguen tarifas para incluirlas en los bloques.
- Los mineros quieren que otros mineros reciban sus bloques, y desean recibir el bloque más nuevo.
Si los nodos completos pueden negociar con mineros y usuarios la transmisión de transacciones e información de los bloques, entonces la competencia entre ellos dará lugar a la formación de precios para el ancho de banda de la red.
Si el ancho de banda de red es pagado por los usuarios de la red, en lugar de donado por los operadores de los nodos, entonces ya no tenemos que preocuparnos porque la red consuma «demasiado» ancho de banda.
CT: ¿Cómo incentivaría tu propuesta una mayor descentralización de Bitcoin?
JR: No sé si lo haría o no, porque no sé a lo que te refieres cuando hablas de «descentralización«.
Lo que puedo decir es que la asignación de recursos por medio del mercado es la mejor manera de satisfacer los deseos combinados de productores y clientes, en cualquier contexto.
CT: ¿Qué tecnologías existentes hacen falta para implementar tu propuesta, y qué tecnologías aún deben ser desarrolladas?
JR: Todas las tecnologías necesarias para crear el mercado que describí ya existen, pero nunca han sido integradas de esta forma en particular.
CT: ¿Cuáles necesitarían integración en los monederos y cuáles tendrían que ser implementadas a nivel de protocolo?
JR: Si por «protocolo de Bitcoin» te refieres a las normas de consenso, entonces el único cambio que se necesita es quitar el límite al tamaño del bloque una vez que ya no sea necesario.
Los cambios reales necesarios para crear el descubrimiento de precios entre los nodos se limitarían al protocolo de comunicación de la red. Tanto los monederos como los nodos tendrán que dar soporte a algunas nuevas funciones del protocolo de comunicación.