Javier González Granado, el notario bitcoiner

Twitter es un mundo extraño. La gente cohabita entre nombres, identidades reales, identidades de empresa, identidades falsas y cosas más raras todavía, como gente que directamente escribe lo que piensa.

Hace unos años, en una discusión en dicha red suscitada por alguna de las noticias del día, coincidí con un tipo al que -fuera de mi línea habitual- di una contestación razonada, pero algo fuerte y burlona. El tipo no se amilanó, y me contestó con lo que llamamos un “ZAS EN TODA LA BOCA”. Vamos, que me dejó sentado y admitiendo que tenía toda la razón en su contestación.

Javier Gonzalez Granado-notario-bitcoinerA partir de ahí empecé a seguirle y tuve la suerte de conocer -en parte, buena e interesante- a Javier González Granado. Poco después saltó a los medios al ser el notario de la Isla de Formentera que decidía tocarle los huevos a la arrogancia bancaria contra el usuario haciendo constar en los contratos hipotecarios que firmaba, una cláusula advirtiendo que los intereses que el banco pretende cobrar en ciertas situaciones son “abusivos”, cosa que no gustó a los bancos.

De nuestro trato frecuente surgieron otras conversaciones, que me hicieron saber que era de las personas que entendía lo que era Bitcoin, y que además lo aceptaba como pago por su trabajo. Es para mi un placer haber podido entrevistar -aunque con muchas limitaciones de espacio- a Javier, que es la persona que le hizo -a mi gusto- la entrevista más especial que he escuchado a Antonio Escohotado. Merece la pena escuchar cómo le cambia la voz cuando Javier, en su faceta de locutor y entrevistador en la radio, le saca el tema de Ibiza.

A partir del minuto 3 no tiene desperdicio, hasta el final, que es cuando a Escohotado se le enciende una chispa especial en su expresión.

Me hubiera gustado entrar a debatir sus respuestas, con las que puedo estar o no de acuerdo -él sabe que no lo estoy en muchas- y haber hecho muchas más preguntas, pero sin ello ya queda un texto largo.

Symposion: ¿Cuándo fue la primera vez que escuchaste hablar de Bitcoin? De esa primera vez a la primera vez que te «sentaste” a leer sobre el tema, ¿paso mucho tiempo?

Javier González Granado: Hace aproximadamente dos años, cuando un cliente me planteó una consulta sobre la legalidad y tratamiento fiscal del cobro en bitcoins de unas rentas por un alquiler de apartamentos turísticos. Obviamente, pospusimos la consulta para la semana siguiente y esa misma tarde me puse a buscar información y (esto se mueve muy rápido) hace dos años no era tanta ni de tan fácil acceso como hoy. Un año después de aquello el mismo cliente me planteó la posibilidad de pagarme unas facturas en bitcoins (con finalidad didáctica: “así entenderás como funciona esto”) y acepté sin dudarlo

S: ¿Qué pensaste cuando «entendiste» el mecanismo sobre el que se sostiene la moneda?

J: Que el protocolo Bitcoin permite al ciudadano recuperar el control de sus finanzas; habíamos dado por supuesto que los intercambios monetarios electrónicos requerían inexcusablemente la intervención de un tercero, un banco, que se había arrogado el papel de contable-interventor de la economía doméstica (y empresarial, claro) y resulta que es posible efectuar pagos telemáticos de forma fiable, automática y a coste cero; esto desde un punto de vista meramente práctico. Desde un punto de vista teórico e ideológico, lo escrito por Wei Dai en 1998 me parece que articula de manera genial el concepto de confianza objetiva, más allá de la creencia subjetiva; no es necesario que tú te fíes de mí, ni a la inversa, sino que la confianza surge como un elemento objetivo derivado de la complejidad del sistema.

peertopeer

S: ¿No te resulta raro que -a día de hoy- ninguno de los dos grandes partidos en el poder en España se haya atrevido siquiera a mencionarlo? ¿Qué crees que querrán hacer cuando llegue el momento de hablar de Bitcoin?

J: No, no me resulta extraño. Parece que la agilidad de los partidos políticos para percibir cambios sociales es inversamente proporcional al tamaño de sus sedes. A esto llegarán tarde también. Salvo error, la única referencia en sede parlamentaria al bitcoin ha sido, el pasado mes de abril, una respuesta del Gobierno a un diputado de UPyD, excluyendo su conceptuación como posible medio de pago electrónico a los efectos de la Ley de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo. Después vendrán las prisas por regular, de eso no hay duda, pero me resulta imposible predecir qué postura adoptarán.

S: A cada uno nos gusta más un aspecto de la moneda -eso lo sabes- pero, ¿qué es lo que te enganchó a ti?

J: Más allá de su mera conceptuación como moneda, como medio de pago, creo que la tecnología que respalda Bitcoin es la puerta a un nuevo internet. Pagos, sí; pero también registro de contratos, custodia de documentos… ¿de verdad necesitamos a Gmail para intercambiarnos mensajes? ¿de verdad es necesario un Registro estatal para dar publicidad fiable a un contrato?

S: Todos tenemos una imagen de lo que es una notario… más o menos incorrecta. ¿Qué es un notario en realidad? ¿Qué le ofrece el notario al ciudadano? ¿Qué relación es la que tiene el notario con el Estado? ¿Qué función podría tener un notario fuera del Estado?

notario-bitcoinerJ: Mucha gente desconoce que somos funcionarios públicos, en régimen peculiar, pues no cobramos del Estado sino de nuestros clientes, pero funcionarios públicos que ejercemos la fe pública extrajudicial y al mismo tiempo somos profesionales del Derecho. Las leyes atribuyen a nuestros documentos valor probatorio de las fechas en que han sido hechos y de que las declaraciones que contienen se han realizado en la forma que dice el documento; al mismo tiempo garantizamos la legalidad de su contenido y la capacidad de los que han firmado.

Somos garantes de la seguridad jurídica preventiva y creo que el viejo dicho de “notaría abierta, juzgado cerrado” sigue siendo verdad.

En resumen, no nos limitamos a decir que en nuestra presencia Pedro ha vendido una casa a Juan, o que Miguel ha hecho testamento; es más que eso. La escritura pública es garantía de que ese Pedro era realmente el dueño de la casa, que ésta no estaba embargada, ni vendida antes, que Juan ha pagado y que ambos son quien dicen ser y que eran plenamente capaces en el momento de hacerlo.

Obviamente nuestra función está respaldada por la figura del Estado y donde falta este respaldo estatal no puede hablarse de notario en sentido estricto.

Por lo dicho nuestra función no es equiparable a la del llamado “notary” en el mundo anglosajón; allí no hay nada parecido a nuestra función y sí, en USA y en el Reino Unido también se compran y se venden casas, pero bajo un esquema distinto que mucha gente desconoce: allí la compraventa inmobiliaria es un documento elaborado con la intervención de dos abogados (uno pagado por el comprador y otro por el vendedor) y como ninguno de ellos puede garantizar que el vendedor es el propietario se hace necesario la intervención de una compañía aseguradora que se compromete a indemnizar al comprador si el vendedor resulta no ser el dueño. Si alguien cree que este sistema (llamado seguro de título) resulta más seguro, eficaz y económico, está de enhorabuena: en España la intervención de notario no es obligatoria, puedes comprar en un documento privado y hablar con una Compañía de seguros para que te asegure la operación.

Escritura Pública o Seguro de Título: esos son los dos únicos mecanismos jurídicos de defensa preventiva de la propiedad privada.

S: Y ahí llegamos a lo que tenía en mente…. ¿qué tiene que ver un notario con Bitcoin? Es decir, qué partes del mismo, qué cosas del mismo, de su estructura y demás son herramientas útiles para él o para nuevas fórmulas que no hemos experimentado? Porque tu aproximación al BTC no es sólo como inversor sino que tienes un marcado interés en la creación en sí.

J: Por razones obvias la conceptuación del bitcoin como medio de pago tiene todo que ver con nuestra actuación. En apenas minutos podría cerrarse el pago de una venta inmobiliaria sin esperar días (en los que el dinero parece estar perdido en un limbo) a que llegue el dinero desde la cuenta del comprador a la del notario y desde la de éste a la del vendedor, sin comisiones (a veces, tanto por emitir como por recibir) y sin riesgos de revocabilidad, claro. Ya se ha constituido al menos una sociedad limitada en España aportando exclusivamente bitcoins a su capital social e imagino que, poco a poco, su presencia será más habitual en nuestros despachos aunque todo ello dependerá de los mecanismos reguladores por los que opte el legislador; es obvio que el bitcoin no es dinero, pero se le parece tanto que en las operaciones jurídicas en las que aflore debe estar sometido a los mismos controles que el efectivo.

Más allá de eso, la tecnología bitcoin abre un campo inmenso en los aspectos que te comentaba antes: depósito público y registro de documentos, y si en algunos de esos supuestos se hace necesaria la intervención de un tercero de confianza, en funciones de escrow, creo que el notariado tiene mucho que decir ahí.

escrow

Por lo demás creo que se nota que mi simpatía por el bitcoin va más allá de su conceptuación como mera moneda y nunca me he visto como un “inversor”, me interesa el sistema como tal y jamás he vendido un bitcoin; es más, hace tiempo, mucho, que dejé de interesarme por su valor de cotización.

S: ¿Cómo afectará la adopción del bitcoin a la figura del notario según el modelo español?

J: Obviamente nos ajustaremos a lo que establezca la ley. Insisto en que la tecnología que permite un pago gratuito, demostrable, seguro, inmediato e irrevocable interesa al mundo jurídico.

S: Siendo un funcionario público, que no cobra del estado pero tiene asegurada su función (y clientela) por las normas del estado… ¿qué servicios públicos crees que son necesarios y cuáles te parecen superfluos o duplicados? ¿En donde tira el sistema más dinero con funciones que no debería abordar?

J: Justicia, Educación y Sanidad deben ser servicios públicos gratuitos y el derecho al uso de una vivienda debería estar también garantizado. Eso en cuanto a lo general, en cuanto a lo concreto duplicidades y trámites superfluos hay muchos, también en mi ámbito, producto de una legislación hipertrofiada que produce normas que entran en vigor el mismo día de su publicación; ¿de qué sirve crear una SL en menos de 24 horas (escriturada, inscrita en el registro y con NIF) si después hay ayuntamientos que demoran meses una licencia?

Y en cuanto a la actividad notarial no puede existir competencia en precios, pues están fijados por arancel; ¿podría liberalizarse? Se ha hecho en algunos países; habría que fijarse en sus resultados y ver si realmente es eso lo que se desea.

S: Ayer tarde la empresa pública de RTVE ha «prescindido» de los servicios del economista Juan Ramón Rallo, tras unas vergonzosas declaraciones, del sindicato UGT, que venían a decir que un liberal no tiene derecho a cobrar de criticar -con sus propias ideas- a quien le contrata. ¿Qué opinas del tema? ¿Una televisión  de todos?

J: Un caso de censura y que una vez más se volverá en contra del censor. El argumento esgrimido y repetido en redes sociales muestra un sectarismo atroz pero desgraciadamente, cotidiano.

¿Una televisión de todos?? Desde luego comercial y endeudada, no.

S: Una de las características de Bitcoin es su inherente anonimato: no puede saberse lo que tienes, mientras tú no reveles los datos necesarios. Es una moneda que está hecha para saltar sobre regulaciones y Estados, para moverse de persona a persona sin que terceras partes puedan meter la mano en tu caja. ¿Te gusta esa idea? ¿Crees que existe un marco de regulación aceptable para Bitcoin o -como otros- que cualquier intento de control sobre la moneda será rechazado por su propia estructura? ¿De qué podría vivir un Estado donde sólo se moviesen bitcoins -obviamente fuera de su control?

J: Todo equilibrio es delicado; por un lado sería de ilusos pensar que en las operaciones en que aflore Bitcoin a la economía real pueda hacerlo sin control y por otro lado una solución prohibicionista como la ecuatoriana conduce al absurdo. Y el anonimato (¿seguro, en todo caso?) es uno de de los aspectos que menos agrada en el ámbito jurídico y no solo por las posibilidades que abre al blanqueo de capitales sino a efectos de ocultación de patrimonios e inembargabilidad. Pero al mismo tiempo una empresa que acepte pagos en bitcoin lo que desea es cumplir con la legalidad y por lo tanto no tendría ningún interés en buscar anonimato. Habrá regulación, seguro. 

Me gusta lo del Estado donde sólo circulasen bitcoins: en ese supuesto teórico solo veo posible que ese país estuviese habitado por hombres justos y que obrasen de buena fe a la hora de liquidar sus impuestos, de lo contrario ese Estado dejaría de existir .

S: ¿Qué opinas de las drogas y de su prohibición? ¿Qué te parece lo que la suma de Bitcoin más nuevas tecnologías como Tor han creado en cuanto a mercados de drogas anónimos? ¿Te atreverías a pronosticar una fecha para la muerte -oficial- de la guerra contra las drogas en nuestra Europa?

Image by ZZVE Illust/Eastnine Inc./Corbis
Image by ZZVE Illust/Eastnine Inc./Corbis

J: La prohibición de las drogas parte de una concepción moral como si estuviésemos ante sustancias portadoras del mal, olvidando que solo existe el bien y el mal en la conducta humana; ha sido un fracaso rotundo traducido en conseguir lo que quería evitar: cada año existen más puntos de venta y las oscilaciones en las demandas de consumo de determinadas sustancias obedecen más a razones culturales o de mercado que a la prohibición; ésta, además es causa de corrupción institucional y ha provocado la aparición de drogas mucho más nocivas que las que pretendía prohibir; el mero consumo es causa de persecución penal en muchos países, en algunos con pena de muerte, con un coste moral y económico insostenible. La única solución en esta materia es información y, en las etapas o ámbitos de la vida en que se precise, prevención y educación.

Sobre el fin de esta guerra contra las drogas Escohotado cree que no habrá una bandera blanca ni una petición de perdón, como ya ha ocurrido con otras cruzadas morales (brujas, negros, homosexuales). No, me cuesta ver una fecha concreta.

La aparición de mercados anónimos de drogas amparados en TOR es una consecuencia lógica de la regulación actual y obviamente que esos pagos se hacen en bitcoin, pero el juicio moral que merece esa moneda es el mismo que el de los dólares que sirven de pago a un fabricante en la selva colombiana.

S: ¿Por qué locutor de radio? ¿Ser padre de dos niños y notario de una isla no consume bastante tiempo? ¿Lo de correr maratones descalzo es una promesa a la Virgen del Pilar o al apóstol Santiago?

J: La radio es una pasión descubierta hace tres años de la mano de Josep Rubio y Toni Ruiz que son los profesionales; sin esa red yo no me tiraría. Me pasa que las noches se me hacen largas y los días cortos y aún así encuentro tiempo para correr; lo de hacerlo descalzo es un regalo que me dejó la lectura del libro «Nacidos para correr»: recomiendo a todo el mundo que lea ese libro y no recomiendo a nadie que corra descalzo. Yo corro y dejo correr.

Imagen por jarmoluk