Por qué una mínima perturbación destrozará el status quo
La creciente dependencia de la deuda, las tasas de interés artificialmente bajas y la prestidigitación financiera hacen al status quo extremadamente frágil. Cuando la deuda se torna impagable y bajar aún más las tasas de interés ya no aumenta el nivel de endeudamiento, la fiesta se acaba.